En Ti me pierdo
Mirándote a los ojos
Adorno de tus labios
Recreado palpito
Íntimos besos
Ahogado me dejan
En océano de luz
Con voz apagada
Corazón encendido
Busco y encuentro
Una caricia etérea
En el silencio abrazado
Estremecido a tu lado
Destilando prosas
Cadencia asombrosa
No cesa de alimentar
El incendio voraz
Atrapado en tus huellas
Caricias y abrazos
Llamaradas ardientes
Letras incipientes
La pluma escribiente
Descorre y desviste
El mensaje escondido
En el un sentido
Mirándote a los ojos
Nuestro fervor
En ti , he de grabar.
Siendo mi baluarte
Mi tierna doncella
Dulce señora
Azuzado en tu boca
Reflejo de luz consume aprisa
Miradas trasnochadas
Rozando inevitable
Tus pétalos suscitan
Este implacable sentir
Inquieto querer animas
Aroma excelso exhalas
En el tiempo nos detenemos
Evocando cantares
Risas de besos
Al son de cítaras
Estos pétalos florecen
Una y otra vez
Trasluce el cielo
Escribo una sinfonía
Ungidas almas palpitan
Germina el capullo
Emanan suspiros
Nacientes compases
Ignotos deslizan
Abiertos a la brisa
Reluce la flor al rocío
Acercas tu oído
Una saeta prenda
Y mi prosa te aclama
Y no cesa
En ti mis notas desando
En líneas surcando
Desplazo mi pluma
Universo infinito
Abierta carta
De plagados emociones
Paginas blancas auguren
Romántica escuche
Mi tesoro escondido
Mirándote a los ojos
Nuestra emoción
En ti, has de albergar
Esperando unidos
Germine y renazca
Corazones fundidos
En esencia imploremos
Robándote la respiración
Un ósculo enamorado
Apasionado discurra
Añorado botín
Perfumemos sábanas
En aromas de amor
Una melodía suaviza
En acordes alegres
Susurrando sutiles
Muestren al cielo
Clamen incesantes
Denoten esta pasión
En el día eres trova
En la noche sublime oración
Transformada en oda
Romance expresan
Notas esperan
Inusitado brillo
La luna admire
Belleza descripta
Poema a ti escriba
Insignificante mi ser todo
Ante ti anonadado
Este caballero humildemente
En sus loas ardientes
Mirándote a los ojos
Nuestro sentir
A ti , os ha de cantar
Herencia de un crepúsculo
Estrellas nos acompañen
Raudas se instalen
Naciendo del horizonte
Ardiendo en la noche
Nítidas divisen
Dádiva dulce
Atesoramos suavemente
Nunca pensamos
Irresistible se hizo el encuentro
Evocamos versos
Labraremos en silencio
En fértiles campos
Un camino certero
Os pido y digo
Amor piérdete en mi
Sendero Eterno
Tomados de la mano
Revestidos de rimas y sonetos
Uno hemos de ser
Sumido en tu cárcel
Mire tu iris estrellado
Decidido reflejará
Todo destino deseado
Apresado en ti
En un beso robado
Acrisolado los dos
En amor eterno
Mi prosa es hoy
El tránsito cierto
Realidades llevarán
Unidos cantando
Trovas , y un aria
Declamarán por siempre
A ti, amada mía
Solo a ti musitando
Estrofas profesando
Mirándote a los ojos
Os he de amar . ❤
Hernán Daniel Camaño ❤ Copyright 2015
Deja un comentario